25 BOLSAS SOUS VIDE 16X20CM LACOR 69453
25 BOLSAS SOUS VIDE 16X20CM LACOR 69453
25 BOLSAS VACÍO SOUS VIDE LACOR
Fabricadas para su uso con productos alimenticios; cuentan con todas las garantías de prestaciones higiénicas y resistencia para envasar al vacío todo tipo de alimentos. Aunque su utilización está indicada especialmente para las envasadoras al vacío de la marca Lacor, las bolsas para vacío son aptas para la mayoría de envasadoras de otros fabricantes.
El espesor de las bolsas para envasado al vacío de este pack de 25 unidades es de 90 micras.
El método de envasado al vacío permite mejorar la conservación de los productos perecederos para alargar considerablemente su vida. Para ello se extrae todo el aire del recipiente que contiene los alimentos cocinados o al natural y se aíslan esos alimentos sellando el recipiente para evitar la entrada de aire.
Algunos productos perecederos deben ser refrigerados o congelados después de envasarse al vacío, pero gracias a este proceso se mantendrán en perfecto estado mucho más tiempo que si se refrigerasen o congelasen sin envasar.
¿Qué es la cocción al vacío?
Productos sometidos a un proceso de envasado al vacío y expuestos a temperaturas que nunca superan los 100ºC. Debido a la diferencia de presión conseguimos temperaturas de ebullición del agua a baja temperatura y la penetración de temperatura a corazón de producto es lineal, es decir, no encuentra moléculas de aire y no produce una reacción radial, por lo que el tratamiento y los resultados obtenidos con el producto están perfectamente controlados.
Una forma simple de explicar la cocción al vacío es decir que en vez de guisar, como es tradicional, los alimentos a 130ºC de calor por un periodo relativamente corto, aquí se cuecen entre 65ºC y 99ºC en tiempos más prologados según la naturaleza del género y su peso.
Es, pues, una cocción larga y a baja temperatura. En un horno convencional, una pieza de carne se cuece a 200ºC de temperatura, lo que ocasiona que el exterior se tueste. Sin embargo, la temperatura en el corazón de la pieza rara vez supera los 50ºC. Por lo tanto, sólo es necesaria una temperatura igual o ligeramente superior a los 65ºC para cocer un alimento, evitando el resecamiento y el endurecimiento de la fibra muscular así como la sobrecocción.